Exterior de San Marcos |
León, pequeña, accesible, trufada de historia, es una ciudad con un innegable toque de pueblo. Una delicia para descubrir en cualquier época del año, eso si, en invierno hay que abrigarse¡¡
Con la catedral más bonita de España y una joya del románico, San Isidoro, como grandes atractivos hay otras visitas indispensables que no hay que perderse. San Marcos como colofón al paseo de condesa Sagasta junto al Bernesga antes de asomarse al Musac y tapear por Eras de Renueva.
La empedrada plaza del grano tan auténtica, la calle ancha desembocando en la casa de los Botines de Gaudí o el tapeo del barrio húmedo (una de morcilla en La Bicha¡) son otros de los imprescindibles.
Asomándose a la zona nueva entre la plaza de Santo Domingo, Gran Vía de San Marcos o la arteria por excelencia Ordoño II se despliegan comercios como Teria Yebar o confiterías exquisitas como Canela (Ordoño II ) o Fuensanta (Gran Vía de San Marcos,37).
Por el centro histórico todavía perduran comercios con sabor, de los de toda la vida, prácticamente devorados por cadenas en ciudades más grandes.
Vinatería Monalisa |
La más bonita |
Una debilidad, el Chelsea, con música y estética british. Y entrando en ambiente de noche La Galocha, un clásico que continúa en brecha.
La tienda del Mercado |
Trastienda del 13 |
Para alojarte puedes optar por la majestuosidad del Parador de San Marcos, el hotel Real Colegiata en el mismo San Isidoro, NH Plaza Mayor o Q¡H Centro, recoleto y pegado a la catedral.
Por Merche